El estudio ‘Más allá de la fuente: los beneficios ambientales, económicos y sociales de la protección de las fuentes de agua’, realizado en 4.000 ciudades por The nature conservancy, concluye que en la mitad de estas proteger de una manera efectiva las fuentes de agua tendría un coste aproximado de 2 dólares o menos al año por persona.

Hay muchas actividades de protección de fuentes de agua eficaces, incluida la protección forestal, la reforestación y la mejora de las prácticas agrícolas en tierras cercanas a las fuentes de agua.

Para implementar estas estrategias, The Nature Conservancy está trabajando con las ciudades y los usuarios del agua en todo el mundo para crear fondos de agua, que permiten a los usuarios  invertir colectivamente en actividades de protección de fuentes de agua con el fin de asegurar una mejor calidad del agua y la mejora de la salud y el bienestar de las comunidades locales. El TNC y sus socios ya tienen 29 fondos de agua en funcionamiento y otros 30 en desarrollo. El primero de ellos fue creado hace en más de 15 años Quito.

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