La transición hacia una economía verde y sostenible, ha generado un amplio debate y tensiones en España (por ejemplo, por el recién aprobado Clúster del Maestrazgo), especialmente en lo que respecta a la coexistencia de dos sectores clave en las zonas rurales: el turismo y los parques eólicos. Ambos sectores son fundamentales para el desarrollo económico y la sostenibilidad ambiental del país, pero su interrelación presenta desafíos que deben abordarse con cuidado. La necesidad de construir parques eólicos como parte del plan de transición ecológica, plantean preguntas sobre cómo mantener la integridad de los paisajes rurales y garantizar que el turismo, una fuente vital de ingresos para muchas comunidades, no se vea perjudicado.

La implantación de parques eólicos en zonas rurales ha sido, por un lado, una oportunidad para dinamizar la economía local. La instalación y operación de estos parques genera empleo, fomenta el desarrollo de infraestructuras y puede aumentar los ingresos fiscales locales. Además, el turismo rural puede beneficiarse de este desarrollo mediante la creación de rutas y visitas guiadas a parques eólicos, convirtiéndolos en atractivos turísticos en sí mismos.

Sin embargo, la presencia de parques eólicos también puede tener impactos negativos en el turismo rural. Uno de los principales problemas es la alteración del paisaje, que en muchos casos es uno de los mayores atractivos para los turistas. La construcción de parques eólicos implica la deforestación de grandes áreas de terreno, lo que puede causar la pérdida de hábitats naturales y la fragmentación del paisaje, afectando directamente a la fauna local. Muchas especies de animales dependen de estos hábitats para su supervivencia y la de sus crías, por lo que su destrucción puede llevar a la disminución de poblaciones e incluso a la extinción de especies. Asimismo, la instalación de aerogeneradores, con su imponente presencia visual, puede afectar la percepción del paisaje natural, disminuyendo su valor escénico y, en consecuencia, la afluencia de turistas que buscan tranquilidad y belleza natural.

Otro aspecto crítico es el ruido generado por las turbinas, que puede ser percibido como una molestia tanto por los residentes locales como por los turistas. La presencia de aerogeneradores también puede causar la muerte de la avifauna local, por colisiones de aves y murciélagos contra las aspas. Estas muertes pueden tener un impacto significativo en las poblaciones de estas especies y en el equilibrio de los ecosistemas locales. Un estudio liderado por la Estación Biológica de Doñana (EBD), centro de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), advierte de un impacto «devastador» de los parques eólicos sobre los murciélagos en Cádiz y, posiblemente, en otras áreas de España.

Consenso social

Desde el punto de vista social, las evidencias científicas muestran que los parques eólicos no tienen un efecto tan significativamente negativo para el turismo en las áreas rurales. Es así que un estudio, que analiza específicamente el turismo en Northumberland, Reino Unido, mostró que entre el 75% y el 90% de los turistas encuestados tienen una actitud entre neutral y positiva hacia los parques eólicos terrestres. Además, determinó que, independientemente de las percepciones sobre el impacto de estos parques en el turismo y la economía local, el número real de turistas aumentó de forma constante, año tras año, desde 2014 hasta 2020.

La belleza natural de Irlanda es indiscutible, Fáilte Ireland, la autoridad nacional de desarrollo turístico, realizó en 2012 un estudio para evaluar el sentimiento de los turistas ante los parques eólicos. Este mostro que el 48% de los visitantes afirmaron que ver un parque eólico no había tenido ningún impacto en su visita, mientras que el 32% declaró un impacto positivo y el 21% un impacto negativo.

Pere Sala, director del Observatorio de Paisaje de Cataluña, comenta que algunas personas aprecian la forma estilizada y el color blanco de los aerogeneradores, viéndolos como un símbolo de sostenibilidad. Sin embargo, otras se oponen a ellos porque contrastan con los paisajes rurales convencionales o alteran los fondos escénicos. Para estas personas, los aerogeneradores impactan en el carácter del lugar, afectando aspectos identitarios, culturales e incluso emocionales que explican por qué se sienten vinculadas a un sitio. Esta es una cuestión relevante que no debe ser menospreciada. Por esta razón, es útil que las empresas de energía eólica colaboren con la comunidad local y las empresas de turismo para buscar alternativas que sean favorables y justas para todos.

Importancia del desarrollo turístico local y el consenso social

A pesar de los desafíos mencionados, el desarrollo turístico local es esencial para la supervivencia y prosperidad de muchas comunidades rurales en España. El turismo rural no solo proporciona ingresos directos a los residentes, sino que también ayuda a preservar tradiciones culturales y a mantener vivos pueblos que, de otro modo, podrían enfrentarse a la despoblación.

Para que el desarrollo turístico local prospere en coexistencia con los parques eólicos, es crucial lograr un consenso social. Esto implica la participación activa de todas las partes interesadas en el proceso de planificación y desarrollo, incluidos los residentes locales, empresarios turísticos, ecologistas y gobiernos locales y regionales. Sin un consenso sólido, los proyectos de parques eólicos pueden enfrentarse a una fuerte oposición, lo que no solo retrasaría su implementación, sino que también podría generar conflictos sociales que afecten negativamente al turismo rural.

Imagen turismo parque eolico de Caramonte

Fotografía Camino hacia el parque de Caramonte, cerca de la villa histórica de Medinaceli (Fuente: El Mundo, 2024)

En este sentido, la transparencia en la toma de decisiones y la inclusión de la comunidad en el proceso son fundamentales. Las consultas públicas, la realización de estudios de impacto ambiental y socioeconómico, y la implementación de medidas de mitigación acordadas por todas las partes son pasos esenciales para asegurar que los parques eólicos sean percibidos como beneficiosos en lugar de perjudiciales.

Mantener paisajes con calidad escénica e integridad ecológica

Uno de los desafíos más importantes en la integración de parques eólicos en zonas rurales es mantener la calidad escénica del paisaje y su integridad ecológica. España es un país con una gran diversidad de paisajes y ecosistemas, muchos de los cuales tienen un alto valor tanto natural como cultural. La preservación de estos paisajes es crucial no solo para el turismo rural, sino también para la identidad y el patrimonio de las regiones.

Una investigación elaborada por Jaume Pla y Javier Esparcia, ambos científicos de la Universitat de València concluyen que la despoblación o la creación de empleo han sido priorizadas en la implementación de proyectos eólicos, sin prestar «suficiente» atención a las cuestiones medioambientales. demás, explican que existe una relación inversa entre despoblación y calidad ambiental, y que en ocasiones los medios de comunicación destacan más las ventajas que los perjuicios de la instalación de parques eólicos. Como indica Pere Sala, la oposición a muchos parques eólicos se ha banalizado, considerándose la controversia como una simple discusión estética. Sin embargo, las razones que explican el rechazo a estos proyectos, generalmente mal explicados y poco o nada consensuados con el territorio, son mucho más profundas.

Razón que la ubicación de los parques eólicos debe ser cuidadosamente seleccionada para minimizar su impacto visual y ecológico. Es fundamental evitar, en la medida de lo posible, las áreas protegidas y los paisajes de alto valor natural. Además, el diseño de los parques eólicos puede adaptarse para integrarse mejor en el entorno, utilizando colores y materiales que reduzcan su visibilidad y creando corredores ecológicos que faciliten el tránsito de la fauna. Sobre todo, como reclaman cuatro fundaciones de protección de la naturaleza (Fundación Global Nature, Fundación Naturaleza y Hombre, Fundación Oso Pardo y Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos) que se prohíba explícitamente la instalación de parques de energía eólica en espacios de alto valor medioambiental. “Algo que no deja de ser, en realidad, el estricto cumplimiento de las medidas de protección con la que ya cuentan los espacios naturales protegidos (ENP), terrestres o marinos, que así constan en las distinta normativas autonómicas y estatales, incluyendo los que forman parte de la Red Natura 2000 o se encuentran en tramitación; además de sus áreas de influencia”.

Consecuencias turismo y parques eolicos

Fotografía de la hembra de quebrantahuesos Masía, mutilada por las aspas de un aerogenerador en el Maestrazgo de Teruel (Castellón) (Fuente: Fundación Global Nature, 2024)

La restauración del paisaje también es un aspecto clave a considerar. Después de la instalación de los parques eólicos, se deben implementar medidas de restauración que incluyan la reforestación y la rehabilitación de hábitats afectados, lo que contribuirá a mantener la biodiversidad y la calidad escénica del entorno.

Recapitulando, la integración de parques eólicos en zonas rurales en el contexto de la transición ecológica en España presenta tanto oportunidades como desafíos. El turismo rural y los parques eólicos pueden coexistir de manera armoniosa, siempre y cuando se planifiquen e implementen de manera estratégica y con un enfoque de participación y consenso social. Recomendaciones clave para lograr este equilibrio incluyen:

  • Planificación participativa: Involucrar, de un modo activo y transparente, a todas las partes interesadas en el proceso de planificación de nuevos parques eólicos, asegurando que se tomen en cuenta las preocupaciones y necesidades de la comunidad local y del sector turístico rural en comunión con las necesidades de los organismos locales, autonómicos y estatales.

En otras palabras, muchos autores sostienen que la fuerte resistencia pública a los proyectos eólicos no se debe necesariamente a una oposición a los aerogeneradores en sí, sino más bien a una postura en contra de los actores públicos y privados que pretenden construir los parques eólicos. Las actitudes hostiles de antemano y la desconfianza de la población local hacia los promotores, la institucionalidad ambiental, y en general, los organismos político-administrativos a nivel local y nacional, suelen ser factores clave en la explicación del conflicto. Estos actores tienden a ignorar las preocupaciones de la comunidad local relacionadas con los impactos multidimensionales (estéticos, económicos, etc.) de los parques eólicos.

  • Selección cuidadosa de sitios: Es primordial evitar la ubicación de parques eólicos en áreas de alto valor paisajístico, como áreas protegidas o emblemáticas, y en zonas de alto valor ecológico, especialmente aquellas que requieren protección de quirópteros y avifauna. Se deben priorizar terrenos ya alterados o con menor sensibilidad ambiental. Uno de los principales retos será mantener o recuperar la coherencia paisajística de los territorios. La ubicación inadecuada de turbinas eólicas, por ejemplo, en corredores migratorios, zonas de caza o áreas de enjambrazón de murciélagos, puede tener un impacto significativo en las poblaciones de estas especies.

SEO BirdLife junto al CSIC, han trabajado en desarrollar una serie de documentos y mapas para que la transición energética pueda ser modélica en tiempo y forma. Mapas, por ejemplo, que resultan útiles porque que muestran las zonas menos propicias para la instalación de energía renovable fotovoltaica y eólica, teniendo en cuenta su potencial impacto en las aves y en los espacios protegidos.

energía renovable fotovoltaica y eólica responsable

Infografía para la instalación de energía renovable fotovoltaica y eólica responsable con el territorio (Fuente:  SEO BirdLife, 2024)

  • Mitigación de impactos visuales y acústicos: Es crucial implementar tecnologías y diseños que minimicen el impacto visual y acústico de los aerogeneradores, como el uso de materiales de baja reflectividad y la instalación de barreras vegetales. Desde un punto de vista paisajístico, lo ideal es que las turbinas de los parques eólicos no se ubiquen en la línea de visión de los puntos de vista importantes, definidos previamente en el análisis del paisaje.

Es fundamental evitar el efecto de covisibilidad, que ocurre cuando los aerogeneradores dejan de ser una atracción y se convierten en una molestia para el público debido a la excesiva concentración de parques eólicos en una región, visibles desde un mismo lugar. Esto puede generar una sensación de saturación o cansancio en el espectador. Por lo tanto, la planificación de un nuevo parque eólico debe considerar los problemas de covisibilidad. El objetivo es identificar las zonas desde las que serán visibles varios parques eólicos. Áreas con una alta concentración de asentamientos, zonas turísticas con gran calidad paisajística o miradores especiales no deben encontrarse en una situación de covisibilidad de múltiples parques.

  • Inversión en restauración y conservación: Comprometer recursos para la restauración ecológica y paisajística después de la instalación de parques eólicos, asegurando que los ecosistemas locales no solo se mantengan, sino que se mejoren.

La Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de Zobra (Galicia) con parte de las rentas generadas por la ocupación de los terrenos del parque eólico de Ameixeiras-Testeiros ha sido clave para poner en marcha diversas actividades y actuaciones destinadas a mejorar la calidad de vida de los habitantes de este hermoso lugar, que forma parte de la Red Natura 2000, así como para generar actividad económica. Una de las iniciativas más singulares fue la rehabilitación de las “casas das minas” con el objetivo de destinarlas al turismo rural. Estas casas, que fueron gestionadas directamente por la comunidad durante varios años y ahora están cedidas, fueron originalmente edificadas para los trabajadores de las minas de estaño en la zona durante las décadas de 1920, 1930 y 1940. La rehabilitación de estas casas, junto con la creación de rutas de senderismo, ha contribuido a dinamizar turísticamente la parroquia.

  • Promoción del turismo asociado a energías renovables: Fomentar el turismo rural vinculado a la sostenibilidad, ofreciendo experiencias educativas y visitas a parques eólicos como parte de la oferta turística.

La Guía de Ecoturismo Eólico, impulsada por la Asociación Empresarial Eólica y Vientos de Futuro, recoge 10 impresionantes rutas por la España rural en las que los parques eólicos son el telón de fondo. Desde la sierra del Perdón, en Navarra, donde los peregrinos del Camino de Santiago se asoman poco después de dejar Pamplona; hasta la Serra da Capelada, en la provincia de A Coruña, donde se encuentran los acantilados más altos de la Europa Continental y es un sitio único para contemplar cómo la tierra se funde de manera abrupta con el océano Atlántico.

  • Educación y sensibilización: Promover campañas de sensibilización y educación sobre la importancia de las energías renovables y su compatibilidad con el turismo rural puede aumentar la aceptación social y el orgullo local. Diversos estudios evidencian que la aceptación pública de la energía eólica crece con el nivel de información y la experiencia previa con este tipo de energía. Por ello, es crucial que la educación en sostenibilidad se oriente a comprender la complejidad del problema al que nos enfrentamos y a actuar tanto a nivel individual como colectivo hacia una economía verde, sostenible, responsable e inclusiva.

El parque eólico de Whitelee, por ejemplo, situado a las afueras de Glasgow, cuenta con más de 130 kilómetros de senderos para caminar, correr, ir en bicicleta o montar a caballo. Asimismo, dispone de un parque y un centro recreativo para la comunidad local, y ofrece a los visitantes la oportunidad de aprender sobre energías renovables y de vivir a la transición verde en directo.

En resumen, la clave del éxito radica en encontrar un equilibrio entre los intereses de conservación del paisaje, la implementación de parques eólicos y el desarrollo turístico en zonas rurales. Con una planificación adecuada y un enfoque inclusivo y justo, España puede avanzar en su transición ecológica sin sacrificar la riqueza cultural, natural y económica que ofrece el turismo rural. Una comunicación fluida y transparente entre todos los actores involucrados, junto con la participación activa de la población local y oportunidades reales para influir en el proyecto, puede evitar que el escepticismo, la desconfianza y las actitudes negativas se conviertan en acciones de resistencia contra los proyectos eólicos.

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