Un concepto que en el mundo de la gestión de los residuos está adquiriendo importancia es el de Packaging. Tanto es así que, en la Semana de la Prevención de los residuos de 2023, su temática central es: No te dejes envolver, en clara alusión a los residuos que genera el sobreenvasado y, por tanto, a la importancia de un buen diseño del producto y su envase.
Pero ¿qué sabemos del Packaging? ¿Qué relación tiene con la sostenibilidad?
La traducción a nuestro idioma de esta palabra inglesa es el envase o embalaje de presentación de un producto. Desde un tiempo atrás, el packaging es considerado una pieza fundamental de la comunicación e imagen de marca de una empresa u organización y la tendencia era la de utilizar muy diversos tipos de embalajes para los productos.
Sin embargo, en estos últimos años en los que la sostenibilidad está adquiriendo gran relevancia en el ámbito empresarial, la asociación de ambos conceptos, packaging y sostenibilidad, es algo cada vez más frecuente, que preocupa a las empresas y para lo que están desarrollando distintos esfuerzos.
Según los autores del informe El proyecto de desarrollo del Packaging, Manel Bertomeu – Camós y Aleix H. Fortuny Cuadra, la toma de decisiones sobre materiales y sobre los procesos de producción y distribución en el ámbito del packaging puede y debe integrar todos los aspectos de la sostenibilidad (ambiental, social y económico) y focalizarse en crear, mantener y distribuir valor para contribuir a un nuevo modelo de prosperidad sostenible.
Por tanto, para evitar el sobreenvasado y desarrollar el mejor embalaje de los productos, que reduzca la generación de residuos innecesarios y la complejidad en el tratamiento de los mismo, se deben tener en cuenta los principios del ecodiseño durante su proceso de producción y se debe procurar disminuir el impacto ambiental durante el ciclo de vida del producto y hasta la eliminación del mismo.
Así, el desarrollo de envases que reúnan características de reciclabilidad, biodegradabilidad o que hayan sido fabricados a partir de materiales reciclados y reutilizables, puede contribuir no solo a la reducción de la cantidad de residuos que se generan y que deben ser tratados sino también a
- La reducción de la huella de carbono,
- La reducción del consumo de materiales y recursos
- La reducción de los costes de producción y transportes
- La mejora de la imagen de marca
- Incremento de la satisfacción del consumidor que cada vez demanda más este tipo de envases sostenibles
En consecuencia, ligar la sostenibilidad y tener en consideración cuestiones sociales, ambientales y económicas aportan importantes beneficios no solo al rendimiento empresarial, sino también a la conservación del medio ambiente.
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