La Generalitat estudia la puesta en marcha de un sistema de depósito, devolución y retorno de envases similar al alemán que podría ponerse en funcionamiento en 2018 y que podría generar unos 1.300 puestos de trabajo en toda la Comunitat Valenciana.

La consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, y el secretario autonómico, Julià Àlvaro, han informado hoy en rueda de prensa de los movimientos orientados a la puesta en marcha de esta iniciativa tras reunirse con Jürgen Resch, director de la ONG Deutsche Umwelthilfe (DUH), impulsora en Alemania del citado sistema de reciclaje.

Según Cebrián, la Generalitat trabaja actualmente en modificar la legislación para que sea posible la puesta en marcha de nuevos métodos de reciclaje y está en conversaciones con varios ayuntamientos de municipios en los que se podría experimentar este sistema.

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El objetivo es, según Àlvaro, finalizar los contactos con expertos durante el verano, tener lista la nueva normativa a principios de 2017 y aplicarla a comienzos de 2018.
Este sistema supondrá el desembolso por parte del consumidor de diez céntimos por cada envase retornable que adquiera en el supermercado o pequeño comercio, que posteriormente le serían devueltos al retornar el envase.

El gestor de este sistema pagará dos céntimos por envase a los comercios, por la labor de depósito y las transacciones necesarias (que en el caso de grandes superficies las podrán desarrollar máquinas del tamaño aproximado de una cabina de teléfono) y otros dos céntimos por envase al responsable de su transporte. La intención inicial, que no está todavía cerrada, es que sea la Generalitat quien actúe como gestor de este sistema.

Los ingresos del gestor de este sistema se obtendrían por varias vías: los de la labor de reciclaje, posibles tasas y los diez céntimos de cada envase que el consumidor final dejase de devolver. Según ha explicado Julià Àlvaro, diariamente se desechan siete millones de envases en la Comunitat Valenciana, cinco millones de los cuales van a parar a un proceso inadecuado.

“Cada año enterramos el equivalente a unos doce o quince millones de euros en la Comunitat Valenciana”, ha indicado. Según las estimaciones de la Generalitat, el comercio valenciano podría embolsarse entre 30 y 35 millones de euros al año con la aplicación de este sistema (el beneficio sería de dos céntimos de euro por envase).
Jürgen Resch ha indicado a los periodistas las ventajas de este sistema, de obligado cumplimiento para los comercios alemanes, con el que se logra el 99 % de reciclado.

En el modelo alemán, según Resch, todos los envases de bebida de vidrio, plástico, lata y tetrabrik son susceptibles de ser reciclados, salvo los de vino y leche, que han de ser depositados en un punto verde.

Fuente: EFE