Representantes de más de un centenar de países destacaron este lunes la importancia de la tecnología para combatir la escasez de recursos hídricos en el planeta durante la primera jornada de trabajo del VII Foro Mundial del Agua (FMA) en Daegu (Corea del Sur).

La declaración suscrita por ministros y otras autoridades políticas internacionales sostiene que «el agua se encuentra en el núcleo del desarrollo sostenible» por lo que se defiende que se incluyan metas y objetivos en este sentido en la Agenda de Desarrollo post 2015 de la ONU.

Los firmantes insistieron «en particular, en la importancia de la convergencia de las tecnologías de información y comunicación (TIC) para una gestión y planificación inteligente del agua», según el texto de la declaración.

El mayor foro mundial sobre el agua comenzó este lunes su agenda de sesiones de cinco días en Corea del Sur con el objetivo de buscar maneras de combatir la escasez de agua en el planeta y sus problemas relacionados, desde la gestión de los recursos hídricos hasta el calentamiento global.

El evento se celebra hasta el viernes en las ciudades de Daegu y Gyeongju, al suroeste de Corea del Sur, y los organizadores esperan congregar a unos 35.000 participantes del sector público y privado.

Los asistentes convocados al FMA 2015 incluyen jefes de Estado y de Gobierno como Alberto II de Mónaco y los presidentes de Corea del Sur, Hungría, Etiopía y Turkmenistán, además de ministros, viceministros, autoridades de gobiernos locales y representantes de empresas y ONG.

http://www.korea.kr/

Los firmantes de la declaración también se comprometieron a «trabajar juntos para asegurar un resultado exitoso de la XXI reunión de la Conferencia de las Partes (COP 21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC)» que tendrá lugar en diciembre en París.

El FMA, un evento trienal cuya séptima edición toma el relevo de Marsella 2012, está organizado por el Consejo Mundial del Agua, una plataforma internacional fundada en 1996 para dar respuesta a los problemas vinculados a este recurso a nivel mundial.

Fuente: El Espectador