Cinco barcos arrastreros de Huelva están aplicando una tecnología para obtener una cartografía digital ambiental detallada del fondo de las áreas de pesca en la zona donde se ubican los Volcanes de fango del Golfo de Cádiz y que además analiza el impacto de la actividad pesquera de cara a mejorar la protección de este espacio.

En el proyecto ‘Nuevas tecnologías en Red Natura 2000: contribución del sector pesquero a la conservación de los espacios protegidos en el Golfo de Cádiz’ participan cinco barcos arrastreros de la Asociación de Armadores de Punta del Moral, que forma parte de la Federación Andaluza de Asociaciones de Pesca (FAAPE), integrada a su vez en al Confederación Española de Pesca (CEPESCA).

La iniciativa aplica un Sistema de Mapa Dinámico (SMD) que permite lograr información más detallada de la actividad pesquera en el Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) de los volcanes de fango del Golfo de Cádiz.

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La cartografía digital analiza la morfología del fondo de las áreas de pesca y analiza la interacción de la actividad pesquera en este hábitat marino para garantizar la protección de la zona.

El secretario general de Cepesca, Javier Garat, asegura que este proyecto es una «nueva muestra de la concienciación» del sector pesquero con la protección de los habitats marinos y su adhesión a un «enfoque ecosistémico» basado en la ciencia para contribuir a la «mejora de la convivencia de la actividad pesquera y el cuidado del medio ambiente».

Entre los resultados de la iniciativa, se ha logrado mejorar el conocimiento disponible de esta zona de alto valor medioambiental y pesquero que incluye especies como por ejemplo la cigala (Nephrops norvegicus).

La cartografía ha sido elaborada por el Instituto Español de Oceanografía (IEO) e incluye información biodinámica (visualización, listado y descripción de los hábitats dentro del LIC), geomorfológica del fondo y batimétrica, así como datos sobre la zonificación de los campos somero y profundo, los polígonos precautorios asociados a los Volcanes de Fango y el tráfico marítimo.

Los profesionales de la pesca participantes instalaron el ‘Sistema de Mapa Dinámico (SMD) en los cinco arrastreros, generaron cartografía digital aún más detallada de las interacciones y registra la información de capturas, especies no comerciales y también las basuras marinas que se encuentran en los lances de pesca.

Por su parte, la responsable de Innovación y Proyectos de Cepesca, Nadia Moalla, ha destacado que conocer al detalle la ubicación, la extensión, las características de estos hábitat permitirá «modificar las caladas para evitar realizar los arrastres sobre estos hábitat, sin menoscabo del rendimiento de las capturas».

Moalla insiste en que los pescadores son «los primeros interesados» en mantener en un estado «saludable» las zonas que son fuente de los recursos que suponen su medio de vida. Por ello, añade que disponer de este conocimiento es «fundamental» para adaptar su actividad a las particularidades de cada entorno.

El proyecto ‘Nuevas Tecnologías en Red Natura 2000: contribución del sector pesquero a la conservación de los espacios protegidos en el Golfo de Cádiz’ forma parte del programa LIFE IP Intermares ‘Gestión integrada, innovadora y participativa de la Red Natura 2000 en el medio marino español’ que realiza en colaboración de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica mediante el programa Pleamar, que está cofinanciado por el Fondo Europeo Marítimo y Pesquero (FEMP).

El objetivo de la iniciativa es lograr la adaptación de la actividad pesquera a las vulnerabilidades de los espacios de la Red Natura 2000 mediante la transferencia de conocimiento científico ambiental al sector pesquero y mejorar la participación y la cooperación entre el sector y las instituciones competentes en la Red Natura 2000 marina.

Precisamente, en una reciente jornada de divulgación sobre investigación pesquera, la técnico del programa marino de SEO/BirdLife Verónica Cortés recordó que las artes de pesca más nocivas en cuanto a las capturas accidentales de las aves marinas son las redes fijas –con 400.000 bajas anuales); el palangre, con 160.000 aves al año por la interacción con el anzuelo y el arrastre, por la colisión de las aves con los cables o su atrapamiento en la red durante la maniobra de pesca.

Así, subrayó que las estrategias de mitigación de las capturas accidentales son «de alta efectividad, «fáciles de implantar, seguras y económicas» y benefician a los pescadores. La experta puso de ejemplo el uso de espantapájaros y el cambio de varios métodos de pesca.

La Cooperativa de Armadores del Puerto de Vigo (ARVI) está colaborando con SEO/BirdLife en el diseño de nuevos dispositivos espantapájaros optimizados para distintas flotas, en concreto para buques arrastreros y palangreros, que además también facilitarán nuevos modelos y sistemas de gestión de residuos y desechos de pescado a bordo.

Fuente: La Vanguardia