El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, ha asegurado que la Conferencia de las Partes de la Convención de la ONU sobre Cambio Climático (COP18) de Doha (Qatar), en la que se ha acordado prorrogar hasta 2020 el Protocolo de Kioto, responde a los objetivos previstos por la UE y España, aunque reconoce que quedan «expectativas que todavía no están cubiertas».

Ramos realizó estas afirmaciones durante su comparecencia, a petición propia, ante la Comisión no permanente para el Estudio del Cambio Climático del Congreso de los Diputados, en donde expuso los resultados de esta cumbre de Naciones Unidas a la que él mismo tuvo ocasión de asistir.

«La valoración es positiva sin perjuicio de que haya ambiciones y expectativas no cubiertas. Las grandes líneas políticas acordadas en Doha abren una nueva fase de negociaciones internacionales bajo un único proceso en el que estamos inmersos todos los países», ha recalcado el responsable de Medio Ambiente.

Según detalló, en este encuentro se han reunido un total de 195 países que sufren de distinta manera los efectos del cambio climático, que varía según el territorio, y que es un fenómeno global, cuyos impactos negativos se proyectan «más agresivamente» en los países más pobres y que «menos responsabilidad» tienen en el problema.

A su juicio, las últimas 48 horas fueron «decisivas» hasta llegar al acuerdo que reflejó «el equilibrio» entre las demandas de los distintos países. En este sentido, detalla que, tras dos semanas «muy intesas» de negociaciones se alcanzó un «acuerdo equilibrado» en un «momento difícil» de negociación internacional.

Federico Ramos. MAGRAMA

Así, puntualizó que el acuerdo gira en torno a dos ejes: un calendario para un nuevo acuerdo internacional vinculante para 2015 y con efectos a partir de 2020, y después la prórroga del segundo compromiso de kioto, a partir de enero 2013.

‘KIOTO 2’

Sobre la puesta en marcha de esta segunda fase de Kioto, dado que la primera finalizaba el 31 de diciembre de 2012, Ramos defiende que así «se asegura el mantenimiento de lo conseguido hasta el momento», y en él los países se han comprometido a reducir las emisiones un 20 por ciento para 2020, respecto a niveles base de 1990.

Además, espera que se trate de un objetivo que podría ampliarse hasta el 30 por ciento, si las condiciones son adecuadas y el resto de países desarrollados y economías emergentes adquirieran compromisos de reducción equiparables.

«Se trata de avanzar en conjunto en mateira de cambio climático y se ha conseguido, como quería la UE, que ‘Kioto 2’ se prolongue hasta 31 diciembre 2020 para alinearlo con el calendario de la legislación de la UE», agrega.

«Se ha abierto un nuevo régimen climático. Deberá entrar en vigor en 2020 en vigor y en él ya no somos los países desarrollados los que nos comprometemos sino que todos tenemos que participar. Es vital y marcará el futuro de la política internacional en matertia de cambio climatico y ésta va ser la batalla a librar en los próximos años», ha sentenciado.

Precisamente, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, destacó el «éxito» de la cumbre, si bien reconoció que «es necesario hacer mucho más» para frenar el calentamiento global.

Fuente: MAGRAMA, Europa Press