El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente quiere dejar de comprar derechos de emisión fuera de España en la medida en que sea posible y, en su lugar, invertir o fomentar políticas internas que además generen empleo con el objetivo de cumplir el Protocolo de Kioto.
«Hoy España está lejos de cumplir Kioto, ya que estamos más de un 20% por encima», reconoció el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas. Así, según el protocolo firmado por España el tope de incremento de emisiones en 2012 debe ser como máximo del 15% respecto a 1990 (año base) y , pese a los 770 millones de euros que gastó el Gobierno anterior en la pasada legislatura, «no se está avanzando» en lograr el reto, reconoció.
Para cumplir con estos requisitos medioambientales, uno de los mecanismos que siguió el anterior Gobierno fue destinar 770 millones de euros a la compra de derechos «para amortiguar el exceso». Aún así, le habrían faltado emplear otros 440 millones para situarse dentro de los límites marcados.
Además, según señaló Ramos de Armas, si España se ha acercado al cumplimiento en los últimos años se debe fundamentalmente a la bajada de la actividad económica e industrial, que ha reducido las emisiones. Por ello, el Gobierno prevé que «probablemente» cuando mejore la actividad económica, las emisiones de CO2 subirán «previsiblemente» y España se alejará más de cumplir Kioto.
Un gasto insostenible
Ramos de Armas criticó la política que siguió el anterior Gobierno en esta materia por ineficaz y cara, ya que colocó a España como el segundo país del mundo, por detrás de Japón, en compra de derechos. «Gastamos mucho dinero y no avanzamos nada», valoró. «Hemos reducido poco, más allá de lo debido a la crisis económica. A futuro, esto sería insostenible».
Por ello, el Ejecutivo de Mariano Rajoy acometerá una nueva política sobre cambio climático que «promoverá y apoyará proyectos de reducción de emisiones antes de seguir comprando derechos fuera».
En ese sentido, el secretario de Estado de Medio Ambiente admitió que la reducción de la asignación presupuestaria para políticas de cambio climático tendrá que ser «un estímulo para esforzarse en pensar y buscar nuevos proyectos innovadores que además generen empleo y actividad económica dentro de España», además de trasladar un «compromiso real» con el Medio Ambiente.
En este contexto, informó de que, para todo 2012, el presupuesto para compra de derechos de emisión es de 42 millones -el anterior Gobierno gastó en 2011 92 millones de euros en comprar derechos de emisión, más del doble- y habrá 4,2 millones para el fondo de carbono.
Entre las meddias a tomar, destacó la creación del Fondo de Carbono, con el que buscarán incentivar y apoyar proyectos innovadores en cambio climático y, especialmente, los que promuevan la eficiencia energética, captación de CO2 y tecnologías de reducción de emisiones con «potencial» en sectores como la agricultura o la construcción.
Fuente: http://www.elcorreo.com
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