El pasado 31 de marzo de 2022 tuvo lugar la aprobación en el pleno del Congreso de los Diputados del proyecto de Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular.

10 de los aspectos clave que implica la aprobación de esta Ley

Esta actualización normativa supone la trasposición a nuestro ordenamiento jurídico de la Directiva (UE) 2018/851 y algunas obligaciones derivadas de la conocida como la Directiva sobre plásticos de un solo uso (Directiva (UE) 2019/904). Además, implica la derogación de la que hasta ahora venía regulando el marco de la gestión de los residuos en nuestro país, la Ley 22/2011 de Residuos y Suelos Contaminados.

Mucho se ha escrito y hablado sobre este nuevo texto legal que entrará en vigor cuando sea publicado en el Boletín Oficial del Estado. Por ese motivo, en este artículo, he enumerado 10 de los aspectos clave que implica la aprobación de esta Ley.

1. La prevención en la generación de residuos es protagonista mediante el establecimiento de nuevos objetivos.

En el texto legal se fija un calendario según el cual se deberá reducir el peso de los residuos producidos: en un 13% para 2025 y en un 15% para 2030, respecto a los generados en 2010.

Además, en 2026 se deberá haber reducido un 50% la comercialización en peso de los plásticos de un solo uso respecto a 2022 y en 2030, un 70%.

2. Limitaciones a plásticos de un solo uso

Como decía al principio, este nueva Ley no solo transpone la Directiva 2018/851, sino también la Directiva Europea de plásticos y eso supone medidas muy concretas sobre este material:

  • Se prohíben determinados productos de plástico: Quedará prohibida la comercialización de utensilios como cubiertos, platos o pajitas de plástico, así como los bastoncillos de algodón (excepto los de uso sanitario), etc.
  • Se deberán sustituir ciertos productos de plástico no compostable: (bandejas, artículos monodosis, anillas de plástico y palitos de plástico) por alternativas reutilizables y otros materiales tales como plástico compostable, madera, papel o cartón.
  • Se pagará por cada producto de plástico: A partir del 1 de enero de 2023 se cobrará al cliente una cantidad por cada producto de plástico no reutilizable que se entregue, especificando este coste adicional en el ticket. Los productos a los que haría referencia este apartado serían: los vasos, sus tapas y los recipientes para alimentos -como las cajas- destinados al consumo inmediato, ya sea in situ o para llevar.

3. Recogida separada de residuos

En la nueva ley se especifica que se deberán implantar nuevas recogidas separadas de residuos según un calendario establecido para:

  • Biorresiduos domésticos.
  • Residuos textiles.
  • Aceites de cocina usados.
  • Residuos domésticos peligrosos.
  • Residuos voluminosos.

4. Fiscalidad verde

Se crean dos nuevos impuestos para incentivar la economía circular:

  • Impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizable o plásticos de un solo uso. Se va a gravar con 0,45 € cada kilo de este tipo de envase.
  • Impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos. Este impuesto irá hasta los 40 € por tonelada métrica

5. SDDR

Esta ley abre la puerta a la puesta en marcha del Sistema de Devolución y Depósito de Residuos (SDDR). La manera en que se establece consiste en que si no se cumplen los objetivos comunitarios fijados de recogida separada de botellas de plástico de un solo uso para los años 2023 y 2027, 70% y 85% respectivamente, se deberá implantar un sistema de depósito, devolución y retorno en el plazo de dos años, pudiendo quedar afectados otros envases además de las botellas de plástico.

6. Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP)

Se ha revisado la regulación sobre la responsabilidad ampliada del productor (RAP) y se ha adecuado a la normativa europea con el objetivo de garantizar que los productores asuman la responsabilidad financiera y organizativa de la gestión de residuos y garanticen la transparencia en su funcionamiento. Además, la nueva Ley introduce las previsiones de desarrollo de la responsabilidad ampliada del productor para los textiles, los muebles y enseres y los plásticos de uso agrario en el plazo de 3 años desde su entrada en vigor.,

7. Regulación de los Suelos contaminados

En este ámbito, la nueva ley regula los suelos contaminados de una forma similar a la de la anterior Ley22/2011, pero como novedad se crea el Inventario Estatal de Descontaminaciones Voluntarias de Suelos Contaminados, que será alimentado por los registros autonómicos.

8. Actuaciones contra el desperdicio de alimentos

La ley prohíbe la destrucción de excedentes no vendidos de productos no perecederos, tales como textiles, juguetes y aparatos eléctricos, entre otros, que deberán destinarse preferentemente a reutilización y reciclado.

9. Agua no envasada

Según el nuevo texto legal en los establecimientos del sector de la hostelería y restauración se tendrá que ofrecer siempre la posibilidad de consumo de agua no envasada de manera gratuita.

10. Otras novedades de la ley

Nuevas infracciones. Se incluyen en la ley nuevas infracciones como el abandono, incluido el de la basura dispersa o littering, el vertido y la gestión incontrolada de residuos peligrosos y también de cualquier otro tipo de residuos.

Amianto. También incluye una disposición específica sobre el amianto, por la que se obligará a los ayuntamientos a que desarrollen un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto y se establecerá un calendario para su retirada.

Sustancias peligrosas y Bisfenol A. La ley incluye en su redacción un texto en el que se establece la necesidad de fomentar la reducción del contenido de sustancias peligrosas en materiales y productos en contacto con alimentos y finalmente se concreta en el texto de la ley la prohibición de la utilización de ftalatos y bisfenol A en envases.

Venta a granel. La ley prevé que los supermercados de más de 400m tendrán que dedicar al menos un 20% de su superficie a vender productos sin embalar, y además «los establecimientos de alimentación que vendan productos frescos y bebidas, así como alimentos cocinados, deberán aceptar el uso de recipientes reutilizables»

María Álvarez es docente en el ISM de los cursos Gestión de Residuos Urbanos y Especialista en Gestión de Residuos