Hace tiempo escribí un post llamado “de gravera a humedal” en el que daba un repaso a ejemplos de restauración ambiental en zonas húmedas que, con la adecuada restauración ambiental, se habían convertido en ecosistemas de importancia dentro de los humedales de España.
Hoy quiero escribir sobre otro proceso de restauración, el del sellado de vertederos (en muchos casos incontrolados) que se han convertido en espacios “naturales” o parques urbanos. Sería más correcto hablar de rehabilitación ambiental, ya que obtendremos un espacio con una función y uso distinto al original.
– Vertedero de Bens (A Coruña) Este vertedero creado en los 70 y situado en la ciudad de A Coruña, se vino abajo en 1996 sepultando todo lo que encontró a su paso y matando a un vecino. Después de un largo proceso de limpieza y rehabilitación, se convirtió un parque de 600.000 metros cuadrados con una inversión de 18 millones de euros. El sellado del antiguo vertedero consiguió desarrollar un proyecto que reubicó más de un millón de metros cúbicos de basura. El biogás resultante del sellado se aprovechó para la producción de energía en una planta de cogeneración. El parque fue inaugurado el 5 de junio de 2001.
– Vertedero de Rivas Vaciamadrid (Madrid) La zona de cárcavas de este municipio fue el vertedero de Madrid hasta los años 80. Los residuos fueron retirados, la zona fue descontaminada y rehabilitada para dar lugar a una zona verde dentro del Parque Regional del Sureste, y al recinto ferial y auditorio Miguel Ríos.
– Vertedero de Sta Catalina (Ceuta). El antiguo vertedero de la ciudad se encontraba en la costa generando un enorme impacto paisajístico, después de casi 80 años de uso fue clausurado en 2002 y después se procedió al sellado y rebajado de su cota. A principios de 2015 se convirtió finalmente en un área recreativa de 60.000 metros cuadrados.
– Vertedero de la Vall d’en Joan (Barcelona). El que fue el depósito de los residuos de la ciudad de Barcelona, es uno de los ejemplos más representativos de transformación de un vertedero en un espacio natural. Después de su clausura y sellado se aprovechó la distribución de los taludes y terrazas por los que circulaban los camiones para facilitar el drenaje y favorecer el crecimiento de la vegetación e integrarlo lo más posible en el Parqeu Natural del Macizo del Garraf.
– Vertedero de Víznar (Granada). El antiguo vertedero de Granada es hoy un gran parque de esparcimiento de la ciudad con más de 4 hectáreas reforestadas. La intervención, con una inversión de 230.000 euros, continuará sucesivamente hasta completar 50 hectáreas en la zona norte de la ciudad.
Afortunadamente los nuevos vertederos se planifican realizando un estudio previo de evaluación y vigilancia ambiental e incluyendo su sellado y recuperación posterior, pero en España tenemos muchos casos de vertederos mal planificados e incontrolados que requieren de una intensa obra de descontaminación y rehabilitación para poder ser de nuevo un espacio con un valor social o paisajístico aceptable. De hecho, la Unión Europea ya nos ha dado un ultimátum para la clausura de 63 vertederos incontrolados que la ley obliga a restaurar. Esperemos poder incluirlos en un próximo post como ejemplos de una buena restauración ambiental de vertederos.
De la recuperación de estos espacios, y otros muchos afectados por diferentes actividades humanas con un alto impacto ambiental hablaremos en el curso Restauración ambiental de espacios degradados.
Deja tu comentario