La crisis sanitaria provocada por el COVID-19 está cambiando muchos de nuestros hábitos: la cuarentena obligatoria, los aplausos de las ocho de la tarde, las conversaciones a través de la pantalla… son muchas las nuevas costumbres que estamos adquiriendo para llevar de la mejor manera posible estos días en casa.
Sin embargo, uno de los focos de mayor conflicto es el consumo. Las autoridades han recomendado que salgamos lo menos posible de casa y, pese a que la salida para comprar alimentos de primera necesidad está permitido, se recomienda que se haga cada varios días y evitar compras diarias. Esto provoca, en algunos casos, un consumo poco responsable. Compramos de más, comida que termina en la basura y puede acabar convirtiéndose en un hábito poco sostenible.
Otro aspecto que preocupa son las pérdidas que esta crisis está acarreando para los comercios. En concreto para los pequeños y medianos comercios. A través de diversos medios, se esfuerzan por sobrevivir a estas circunstancias, pero el apoyo vecinal es un factor clave para ello.
Desde el ISM hemos señalado en anteriores ocasiones los beneficios que tiene el comercio de temporada y proximidad en el Medio Ambiente: reducción de la huella de carbono, menos gasto energético, alimentos de mayor calidad… Pero fomentar este modelo de consumo también puede ayudar a mejorar nuestras localidades. El dinero que dejamos en una tienda local se mantiene 3 veces más en nuestra localidad que el dinero que dejamos en las grandes superficies (sueldos de vecinos y vecinas, por compras en otras tiendas locales, etc.). Además, ayuda a crear un sentimiento de pertenencia a la comunidad.
Durante estos días han surgido muchas iniciativas para fomentar y defender este comercio de proximidad. Muchas de ellas por internet, ya que según los últimos datos, el consumo online se ha disparado hasta un 73,7% respecto a estas mismas fechas durante el año anterior. Se han hecho varios llamamientos (también desde el gobierno central) al consumo de alimentos locales, así como a una mejor planificación de las compras.
La página web Frena La Curva surgió como una plataforma donde recoger las respuestas vecinales ante la crisis. A través del registro, se puede ofrecer un servicio a nuestros vecinos (llamar a personas mayores, pasear perros, escribir cartas) o bien pedir ayuda, personas que no están en situación de poder salir de casa. Una de las opciones de esta iniciativa es buscar pequeños o medianos comercios de proximidad. Es a nivel nacional, por lo que personas de toda España pueden consultar los comercios más próximos a sus localidades.
¡La Colmena Dice Sí! es una iniciativa de consumo local que conecta consumidores y productores de proximidad, con la creación de comunidades llamadas Colmenas. Las interacciones sociales se crean primero online (en la plataforma web) y se refuerzan en la vida real durante los encuentros presenciales; es decir, durante los días de distribución que tienen lugar una vez por semana. Surgió en 2014 pero actualmente sigue en funcionamiento durante esta cuarentena. Puedes buscar tu colmena más próxima en el buscador de su página web.
En Madrid, la cuenta de Instagram Comercios Locales hace una recopilación de todos las tiendas de alimentos que están abiertas durante esta cuarentena en los diferentes barrios de la ciudad.
Otra opción es contactar por teléfono con los diferentes mercados de la capital, ya que muchos de ellos no ofrecen su oferta por internet. A través de un listado facilitado por el Ayuntamiento de Madrid, podrás encontrar el número de teléfono de tu mercado más cercano. También se puede comprar online en estos mercados a través de mercado47, plataforma que permite la compra por Internet en tiendas locales.
A través de la iniciativa Compartimos Barrio, establecimientos de alimentación, bebidas, productos y bienes de primera necesidad, servicios de hostelería y restauración y muchos otros considerados esenciales pueden visibilizarse en la plataforma, junto con servicios de reparto.
También ha surgido Madrid KM0 (su web estará disponible próximamente). Una cooperativa de servicios que gestiona un centro logístico para pequeños proyectos productivos. Su objetivo es poder apoyar la distribución conjunta dentro de la ciudad de Madrid y la exploración de nuevos canales de comercialización a través de la intercooperación y la creación de un catálogo conjunto de productos de proximidad. Hasta que se ponga en marcha su página web, puedes obtener más información en este enlace.
En Cataluña, Pam a Pam surgió como una herramienta de economía solidaria. Recoge en su mapa gran variedad de proyectos llevados a cabo en la comunidad autónoma, entre las que también se pueden encontrar iniciativas alimentarias que trabajan con la filosofía de km 0 o proximidad.
En Arran de Tierra, en colaboración con Pam a Pam han creado un directorio que recoge los contactos de productores y pequeños distribuidores del sector agroecológico para facilitar el enlace con consumidores que quieran abastecerse de producto local tanto ahora como el resto del año. En él se especifica su contacto, qué tipo de productos venden, de qué manera se distribuye y en qué municipio.
En Barcelona, Barcelona Comerç ha lanzado la página Botigues Obertes en la que, a través de un mapa interactivo, se puede consultar qué tiendas continúan abiertas.
En Navarra el proyecto Ekoalde quiere crear y promover canales cortos de distribución para afianzar la actividad del sector así como la puesta en valor de los productos ecológicos producidos y elaborados en Navarra. Asimismo, busca impulsar el desarrollo rural y contribuir a la viabilidad del sector primario dignificando la labor de los productores locales. En su propio mapa interactivo, se pueden localizar los comercios distribuidos por la comunidad, sus datos de contacto así como el tipo de productos que ofrecen. El proyecto también ofrece la posibilidad de servicio a domicilio.
Por su parte, el gobierno de Cantabria ha habilitado una herramienta para fomentar la venta directa de alimentos de Cantabria entre productores y consumidores, «se busca facilitar la labor que el sector primario esta realizando en estos momentos para garantizar el abastecimiento de los alimentos básicos a toda la población» ha asegurado Guillermo Blanco, consejero de desarrollo rural y alimentación. «También para echar una mano en estos momentos complicados a productores y trasformadores, si consumimos productos locales nos estamos haciendo un favor entre todos».
En Extremadura ha surgido la iniciativa #YoSigoAbiertoBadajoz de la Concejalía de Comercio del Ayuntamiento de Badajoz. Se trata de una plataforma para informar a sus vecinos de cuáles son los comercios y negocios que continúan abiertos al público o bien prestando servicios en el estado de alarma debido al Covid 19.
En Granada, Merca80, el Mercado municipal del barrio del Zaidín ha puesto a disposición de los consumidores la entrega a domicilio de pescado, carne y frutería a cualquier parte de la ciudad, pueblos incluidos. Para ello, han facilitado una serie de teléfonos con los que contactar.
El pasado viernes surgía la campaña #EstePaísLoAlimentamosUnidos con el fin de poner en valor el trabajo del sector hortofrutícola. Más de 100 agentes del sector, entre asociaciones, entidades y empresas, se han unido ya a esta iniciativa. El objetivo es lanzar a la ciudadanía un mensaje común que ayude a valorar el trabajo diario de todo el sector hortofrutícola y su industria auxiliar para seguir abasteciendo a los mercados de frutas y hortalizas de calidad durante la crisis sanitaria.
Durante este periodo de confinamiento, son muchas las muestras de creatividad de las que estamos siendo testigos. Por lo que iremos actualizando esta lista según se vayan sucediendo nuevas iniciativas e ideas para fomentar el consumo local.
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